Reseñas

Café Budapest Crukrazda un rincón mágico.

El Café Budapest Crukrazda es un rincón mágico en la Ciudad de México. Se encuentra en las entrañas de Polanco y tiene una majestuosa vista del parque Lincoln. En este espacio extraordinario podrás encontrar una gran variedad de tés, cafés, postres y alimentos salados. El lugar cuenta con un sinfín de opciones que podrán complacer cualquier antojo. Sin lugar a dudas, es uno de los lugares más hermosos de la Ciudad.


Este rincón mágico en la Ciudad de México se encuentra en el corazón de uno de los lugares más emblemáticos: Polanco.  Para acceder a él se tiene que entrar por el restaurante Los Canarios. En primer lugar, se encuentra la tienda de diseño Common People. Al fondo, se localiza una hermosa escalera de mármol, la cual, tendrá que ser subida para acceder al extraordinario café.  Desde que se recorren los escalones, se puede sentir el misticismo de este lugar. Una vez arriba, la sorpresa es inmediata al observar este pequeño y recóndito espacio. Instantáneamente, te transportas a un pequeño café en Europa Oriental.

Al pasar por la puerta, la realidad de la caótica Ciudad de México desaparece y da lugar a una nueva dimensión, en la cual reinan la paz, la tranquilidad y se incorpora el recuerdo de una época del pasado. Con pocas mesas y a media luz, el Café Budapest Crukrazda trae calma y serenidad al alma. Los ojos no paran de admirarse ante tanto detalle pues cada rincón de este lugar está diseñado minuciosamente. Tanto el inmobiliario como las vajillas hacen que su visita sea una experiencia surreal.

A primera vista resalta el hermoso espectáculo de la terraza. En ella, se encuentran tres mesas pequeñas en las cuales se puede disfrutar del paisaje del parque Lincoln y de su hermoso reloj. Es el lugar perfecto para disfrutar de una taza de té acompañada de un suculento bocadillo y de una singular lectura. La energía que transmite este rincón es perfecta para el desarrollo de la creatividad. En él podrás respirar aire puro, escucharás el canto de los pájaros y tendrás la luz necesaria para escribir o leer. El ruido de los coches desaparece para dar paso a un sonido peculiar, del aire chocando contra las ramas de los árboles.

Para todos los fanáticos del té, este lugar será el paraíso. El Café Budapest Crukrazda cuenta con más de veinte variedades de té, todos elegidos por Leticia Saenz, la primera somelier de té en México. En unos peculiares tubos de ensayo, se presentan hojas de té con sabores como: White Peony, Pomegrante, Strawberry Love, Dragonwell, Merry Berry, English Breakfast, Earl Grey entre otros. Elegir una opción es una difícil tarea ya que el aroma de cada uno es delicioso y especial. El White Peony destaca por su sabor floral y dulce: perfecto para medio día. Por cien pesos, podrás adquirir una tetera de cualquier sabor de tu elección. También se puede pedir sólo una taza.

Para acompañar el delicioso té, se pueden adquirir distintos bocadillos miniatura. En su carta se puede encontrar un apartado en donde se presenta una pequeña variedad de bocadillos hechos especialmente para compartir en la hora del té. Cada uno de ellos es diferente y tienen un costo aproximado de treinta pesos. No se pueden ir sin probar un Isler sabor chabacano. Se recomienda pedir uno de cada uno para acompañar un té sabor Earl Grey a las cinco de la tarde.

En este hermoso rincón se puede encontrar una gran variedad de postres originarios de Hungría. Podrás saborear desde un rico pastel o un strudel de manzana, hasta un brownie con whiskey (con una bola de helado para los amantes del azúcar). En la carta, destaca, en primer lugar un Cheesecake de zarzamora. Sin embargo, la cubierta puede ser cambiada por mermelada de fresa o Chabacano. Estas mermeladas son artesanales y su sabor es muy peculiar.   Por otra parte, se puede disfrutar de deliciosas roscas como la de Nutella con avellanas y la de pie de limón. Unas delicias.

El café del lugar tiene un sabor inigualable. Desde que entras al pequeño recinto llega un olor particular y delicioso: a café recién elaborado. En el Café Budapest Crukrazda podrás ordenar desde un café americano hasta un capuchino latte. En la carta existe la opción de probar un café turco (la cafetera que te dan alcanza para tres tazas). El expresso macchiato resalta sobre las demás bebidas. Su sabor es fuerte pero su consistencia es cremosa. Toda una experiencia para los amantes del café.


El café Budapest Cukrazda es un lugar lleno de misticismo y romanticismo. Es el espacio perfecto para encontrarse a uno mismo y explorar aquellos espacios recónditos del alma. De la misma manera, es el mejor lugar para compartir un momento íntimo con aquellas personas que son importantes en nuestra vida. Una primera cita será inolvidable. Este café satisfacerá hasta los gustos más exigentes. Sin lugar a dudas, es un rincón que debe ser frecuentado por todos aquellos amantes del café y del té.
A continuación de te dejo con una lista de libros muy ad hoc al lugar. Estas letras, en conjunto con un rico café o té, te llevarán a realidades muy lejanas y te sentirás como si estuvieras presente en la bella Ciudad de Bucarest.

  1. El Maestro y Margarita – Mijaíl Bulgákov
  2. La Metamorfosis – Franz Kafka
  3. La guerra no tiene rostro de mujer – Svetlana Alexievich
  4. Liberación –  Sándor Maraí

¿Qué estás esperando para transportarte a Europa Occidental y disfrutar de una maravillosa experiencia?

 

 

 

 

 

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