Helado de Matcha, una receta fácil y deliciosa.
Los helados son de mis comidas favoritas en el universo. Amo los helados cremosos, sobre todo los de chocolate. Sin embargo, soy súper fan del matcha y la mayoría de las veces, cuando lo veo en la carta, no dudo en pedirlo. Como muchos de ustedes saben, estoy estudiando para ser Sommelier de Té en la Escuela Mexicana de Té. En el módulo 7 se ve cocina con té y uno de las tareas fue hacer un helado de matcha o en su defecto, ponerle este mágico y delicioso polvo verde a un helado de vainilla. Como me gustan los retos, decidí hacer mi helado en casa. Esta receta que les voy a compartir, es idea de Nadia de la Vega y la pueden seguir en Instagram. Algunos de ustedes mostraron interés en este postre así que les voy a compartir cómo hacerlo. ¡Se van a sorprender de lo sencillo que es!
Ingredientes:
- 500 ml de crema para batir.
- 300 ml de lechera.
- Matcha
Preparación del helado de matcha:
Para hacer este helado de matcha necesitas una batidora eléctrica y mucha paciencia. A continuación te enlisto los pasos.
- En un bowl poner la crema para batir y batir hasta que se formen picos suaves. Para lograrlo, batí por como 30 minutos. Esto depende de tu habilidad y del tipo de crema que utilices.
- Agregar el Matcha. La cantidad depende de qué tanto te guste el matcha. Para ser sincera, no medí cuánto polvo le puse pero si fue bastante. Al tanteo puedo decir que le puse 10 gramos. Ojo, a mi me encanta su sabor intenso.
- Mezclar súper bien el Matcha con una espátula para evitar que la crema pierda su suavidad.
- Una vez que la mezcla está lista, agregar los 300 ml de lechera. Batir hasta que todo quede uniforme y cremoso.
- Vaciar la mezcla en un recipiente y meter al congelador. En mi caso, lo comí el siguiente día.
- ¡Servir y disfrutar!
Ven, les dije que esta receta es súper sencilla pero muy ganadora. Este helado de Matcha quedó muy cremosito y dulce. Si les gusta algo menos empalagoso pueden usar una menor cantidad de lechera. Aquí es cuestión de gustos y de ir probando. Estoy segura que les encantará.
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Fun Fact: ¿Sabían que el Matcha no se originó en Japón? Este tipo de té tiene su origen en China durante la dinastía Song. Sin embargo, años después, fue perfeccionado por los Japoneses y se ha convertido en el elemento central de su ceremonia del té, el Chanoyu